Donde habitan los dioses: el gran acantilado rocoso y los budas Shūkutsu Magaibutsu del templo Kannon-in
Escribe un artículo en francés sobre: Donde habitan los dioses: el gran acantilado rocoso y los budas Shūkutsu Magaibutsu del templo Kannon-in
rewrite this content and keep HTML tags as is:
En la octava entrega de esta serie, les presentamos un lugar sagrado del oeste de la prefectura de Saitama donde se venera una colección de incontables estatuas budistas en un acantilado de roca.
La superficie de la roca que aloja los “108.000 budas”
Un peregrinaje es un viaje en el que se recorre una serie de tierras santas y lugares sagrados para rezar en ellos. Los peregrinos budistas ruegan por el favor búdico en templos llamados fudasho. Ofrendan un donativo como prueba de su visita, les estampan un sello rojo correspondiente en la cartilla y van al siguiente destino de la ruta.
Montañas, rocas gigantescas, cascadas y otros elementos naturales que ya eran escenarios para la veneración de los dioses se convirtieron en lugares sagrados del shugendō, se fusionaron con el budismo y acabaron siendo destinos de peregrinaje. Durante las eras Heian (794-1185) y Kamakura (1185–1333), cuando floreció el budismo, se convirtieron en fudasho los templos dedicados a Kannon Bosatsu, un bodhisattva al que los japoneses tienen particular devoción. Chichibu Fudasho, con sus 34 lugares sagrados dedicados a Kannon, es una ruta de peregrinaje relativamente compacta de unos 100 kilómetros que ostenta una larga historia y una amplia fama. Su cercanía a Edo contribuyó a que recibiera una gran afluencia de visitantes que acudían para rogar por el favor búdico.
El pabellón Kannon-dō con el acantilado detrás. Fotografía: Ōsaka Hiroshi.
Pasada la puerta del templo Shūkutsu-zan Kannon-in, trigésimo primera parada de la ruta Chichibu Fudasho, empiezan los 296 escalones de piedra que llevan al templo.
Una vez en la cima de la escalera, a la que llego sin aliento, se extiende ante mí el recinto del templo, rodeado de piedras por tres lados. En el frente se yergue el Kannon-dō, como envuelto por un enorme acantilado de roca. La pared rocosa está compuesta por estratos de arenisca de unos 17 millones de años y, al parecer, conserva una fina capa de laminación cruzada que muestra las huellas del flujo de agua de cuando se sedimentó.
Seijō no Taki, una cascada al fondo a la izquierda del pabellón, presenta una caída de 30 metros, pero tiene poco volumen de agua. Se dice que en el pasado los ascetas ejecutaban sus prácticas aquí, por lo que debía llevar más agua y bajar con mayor fuerza.
En el acantilado de roca, a la izquierda de la cascada, se extienden los Shūkutsu Magaibutsu, una enorme colección de estatuas de Buda de 18 centímetros talladas en la piedra. También quedan varios niveles de budas en el suelo. El conjunto se conoce como los 108.000 budas. No se sabe seguro de qué época datan las tallas, pero se estima que se elaboraron en torno al periodo Muromachi (1333-1573) y existe la leyenda de que las talló Kōbō Daishi en una sola noche.
Cuando estás en ese recinto sacro y observas la enorme pared de roca, sientes el poder y el valor de un lugar de plegaria que ha existido de forma continua desde tiempos antiguos.
Gotas de agua cayendo en la poza de la cascada. Fotografía: Ōsaka Hiroshi.
Shūkutsu-zan Kannon-in
- Divinidad a la que se consagra: Shōkanzeon Bosatsu
- Dirección: Iida Kannon 2211, Ogano-machi, Chichibu-gun, Saitama-ken
Este templo de la secta Sōtō se alza en la ladera media del monte Kannon, un pico rocoso de 698 metros de altura. Según la leyenda, su origen se remonta a la vez en que Hatakeyama Shigetada, un general de principios del periodo Kamakura, encontró una estatua de Kannon en el nido de un águila cuando cazaba en la zona. Ha sido un lugar sagrado del shugendō desde la antigüedad y se dice que es el punto de más difícil acceso de la ruta Chichibu Fudasho.
Dicen que, solo con subir la escalera de piedra, los peregrinos logran protección divina contra la mala fortuna. Fotografía: Ōsaka Hiroshi.
Estatua de Kōbō Daishi, que supuestamente talló los budas del acantilado. Fotografía: Ōsaka Hiroshi.
Bajo la cascada se venera a Fudō Myōō, del que se dice que protege a los ascetas. Fotografía: Ōsaka Hiroshi.
Reportaje, texto y edición: Kitasaki Jirō.
Fotografía del encabezado: los Shūkutsu Magaibutsu del templo Kannon-in.
Fotografía: Ōsaka Hiroshi.
(Traducido al español del original en japonés.)
Publicar comentario